Buñuelos de manzana a la cerveza. Beignets de pomme à la bière

Otra recetita dulce permitida en Mardi Gras, antes de entrar en esta época de Cuaresma. Unos buñuelos de manzana a la cerveza (Beignets) con un rebozado a base de cerveza, que está de muerte lenta.

Receta de Buñuelos de manzana a la cerveza. Beignets de pomme à la bière

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Ingredientes:

• 125 g de harina
• 4 manzanas
• 3 huevos
• 100 ml de cerveza
• 60 gr Azúcar
• 1 limón (zumo)
• 1 pizca de sal
• Aceite para freír (AOVE)
• Azúcar y canela para espolvorear

Procedimiento:

1. Pelar y descorazonar las manzanas.
2. Cortarlas en rodajas de unos 5 a 6 mm.
3. Cubrirlas en un baño de agua y zumo de limón para evitar que no se oxiden. Reservar.
4. En una fuente mezcla la harina, el azúcar y vierte los huevos.
5. Añade poco a poco la cerveza. La pasta debe ser lo suficientemente espesa como para cubrir las manzanas.
6. Calienta el aceite para freír.
7. Sumerge cada rodaja de manzana en la masa de buñuelos, cúbrela bien y luego fríela en el aceite durante unos minutos, dándole la vuelta de vez en cuando.
8. Escúrrelas sobre un papel absorbente y sírvelas espolvoreadas con la mezcla de azúcar y canela.

Et voilà, bon appétit!

Ma Touche
Esto buñuelos de manzana no han sufrido modificación alguna en su elaboración, así tal cual están deliciosos, son sencillos de elaborar y además los niños se los comen por docenas. La manzana no está casi hecha, solo blandita y algo más dulce. Esta receta tampoco lleva levadura, el hecho de llevar una bebida gaseosa cumple con los cánones estrictos, jeje como agua con gas o sidra también. Tu si quieres puedes añadírsela pero no lo recomiendo si haces la masa muy pronto, fermenta y se hace indigesto
Consejo de chef: no frías aceite reutilizado, siempre aceite en un primer uso, si no, tu capricho de postre se vuelve indigesto y fastidiará tu siesta. Por eso siempre te recomiendo que utilices aceite de oliva virgen extra (AOVE), este no es embebido por la masa y será súper ligera, para unos buñuelos de 10!

¡Un acuerdo Di-Vino!

Para un placer adulto, se puede acompañar de un Calvados AOC de la región de Normandía, es un aguardiente que proviene de la doble destilación de la sidra. También un Jerez Cream puede resultar un acuerdo divino. Para los niños, por favor un chocolate caliente o un vaso de leche.

Orígenes del beignet

A estas alturas , te habrá quedado claro que cada región tiene su Beignet, aquí hemos visto los pets de nonne y las bugnes lyonnaises. Esta en particular es una especialidad Normanda, aunque generalizada en todas las regiones con cultura de manzana y particularmente esta sea de Alsacia, lo digo por la cerveza, claro. Una versión deliciosa y muy de Normandía sería echarle calvados a la masa ¿Verdad, no de debe estar nada malo? Lo probaré en cuanto me haga con una botella. La cocina clásica francesa está repleta de recetas como esta, deliciosa y tan sencilla que se puede hacer con los niños de la casa, elaboraciones con los productos del “patio trasero”. Solo disponibles con los alimentos que da la tierra cada temporada.

Los orígenes de la masa frita son muy antiguos, ya se encontraban en las mesadas de la Antigua Grecia. En De Recocinaria, de nuestro conocido “investigador culinario” Apicius, aparece la primera receta escrita de masa frita dulce o “aliter dulcia”. Sin embargo sabiendo lo que sé sobre masas fritas y que descubrí investigando para la Omelette Norvégiène, podría ser que los griegos quienes llegaron muy lejos en su conquista de territorio hacia Asia, conocieran esta técnica de manos de las cocineras de la Tartarie Chinoise. Pero esta afirmación debe ser comprobada, seguiré investigando.
En cualquier caso, en Francia, la etimología de la palabra es sencilla, de bigne (tumor o bulto) siglo XIII. La beigne era una bola de masa que se freía en mantequilla. De bigne, se declina también bugnes.

¡Música, Maestro!

Una canción inusual pero muy as hoc! Anúna “La Chanson de Mardi Gras”.