Cuando hace calor, esta sopa fría de tomate con mozzarella y hierbabuena, se hace de lo más apetecible. Es sobre todo en verano, cuando me gusta darle al tomate ese toque fresco y tan veraniego que le aporta la hierbabuena. Además, el hecho de rematar en la mesa esta sopa con un poco de queso mozzarella, te deja con el estómago saciado, porque masticas un poco. Espero que disfrutes de esta sopa muy sencilla y deliciosa. Es desde luego un primer plato ideal para disfrutar en verano.
Sopa fría de tomate con mozzarella y hierbabuena
Ingredientes para 4 comensales
- 1 kg de tomate triturado
- 1 cebolla pequeña
- 2-3 dientes de ajo
- ¼ de pimiento rojo
- 2 ramitas de hierbabuena
- 4-5 ramitas de tomillo
- 1 c. sopera de azúcar panela o moreno
- Aceite de oliva virgen extra (AOVE)
- 1 pieza de mozzarella fresca
- Sal y pimienta al gusto
Procedimiento
- Pica la cebolla y el pimiento en mirepoix o macédoine (entre 1cm y 0,5 cm). Pica muy finito el ajo.
- Pocha la cebolla en el aceite en la cocotte, hasta que la cebolla esté tierna. Acuérdate de echar la sal para que la cebolla se poche sin quemarse. Operación que dura 5 minutos.
- Cuando la cebolla está tierna, añade el ajo y el pimiento. Deja pocharse unos pocos minutos.
- Entonces añades las hierbas, cocina un minuto.
- Incorpora el tomate triturado y el azúcar. Deja cocinarse a fuego lento o medio bajo durante 25-30 minutos.
- Tritura todo. Si fuera necesario, rectifica la sazón con sal y pimienta y deja enfriar en la nevera unas 6 horas, para asegurarte que la sopa está bien fría.
- En el momento de servir, corta la mozzarella en 4 trozos. Sirve la sopa a cada comensal y añade un trocito de mozzarella en cada plato.







Et voilà, bon appétit!
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Trucos y Consejos
Te invito a que prepares esta sopa con tomates naturales, pero asegúrate de pelarlos primero.
Por supuesto esta sopa puedes servirla caliente también. Si le añades un poco de caldo de pollo, le darás una textura más ligera y fluida.
Si no te gusta el queso, puedes poner el de tu elección. Pero no prescindas de la hierbabuena, de verdad que ¡es el detalle que hace la diferencia!
También puedes rematar en la mesa con unas gotas de vinagre balsámico.
Sabes cuanto me gustan las preparaciones con tomate frías, te acordarás de la salsa de tomate fría y especiada, que preparé para elaborar unas buenas parrilladas, sanas y sabrosas.

Un acuerdo Di-vino
En Francia, es habitual servir esta sopa de tomates -de textura velouté- con hierbabuena, acompañada de un rosado, como pueda ser un Touraine, los vinos del Loira en general, pero también un clairet de Burdeos. No es descabellado hacer lo propio con los rosados españoles.


Está riquísima!!! El detalle de la mozarella no lo había probado, pero para la próxima… contigo siempre se suma!!!!
😘😘
jeje, muchas gracias querida Julia! Un besote
una receta muy sana y sabrosa
gracias!